viernes, 5 de febrero de 2010

"Holidays to remember" - Prólogo...

Prólogo. (Amy)

Era la última hora del último día de clases del último año de secundaria. Mis cuatro amigas y yo estábamos preparando la salida que haríamos esa noche de viernes para despedirnos del año escolar. No podíamos decidirnos por el lugar y tampoco teníamos muchas opciones tentadoras para escoger.

- Podríamos ir a Moore – propuso Kathleen, no muy conforme con la idea.

- Odio Moore – soltó Kimberly y dirigió una mirada fulminante directo hacia Kath -. ¿Qué dicen de Legends?

- ¡Sí!

- Bueno.

- Como quieran.

- Sí

Eran cuatro sí, lo que significaba que acabábamos de escoger el lugar. Legends sería testigo de las locuras que ocurrirían esa noche.

Luego de festejar con nuestros compañeros en la puerta del colegio por un largo rato, fue hora de que volviera cada una a su casa. Ya habíamos arreglado todo para la salida, sólo restaba esperar a que llegase el momento.

Para pasar el rato, busqué la ropa que me pondría y, una vez lista, la dejé sobre el escritorio de mi pieza junto con las pinturas. No tardé demasiado tiempo en elegir ya que tenía pensado desde hacía el miércoles lo que iba a vestir esa noche.

Eran las seis y el sueño comenzaba a apoderarse de mi cuerpo. Me tiré en la cama y, mientras escuchaba la radio, sentía cómo mis ojos comenzaban a entrecerrarse. Al cabo de unos minutos ya me encontraba volando en el séptimo sueño.

Gracias a Dios había puesto la alarma y a las diez y media me desperté. Había dormido cuatro horas y media, estaba más descansada que nunca y tenía muchas ganas de salir.

-Suerte que no tenemos que tragarnos toda esa fila – dijo Ashley soltando un largo suspiro señalando hacia la larga hilera de mujeres esperando para pasar.

Entramos enseguida. El lugar estaba repleto de gente y eso me encantaba.

Fuimos directo a nuestro lugar de siempre: una mesa ubicada cerca del patio. Estuvimos allí un largo rato mientras charlábamos con nuestros amigos. Algunos del colegio, otros del lugar. Habían pasado dos horas cuando la sed me atacó.

-No se ustedes pero yo voy por un trago.

-Y yo – Kathleen saltó de la mesa para unirse a mí.

-Cuenten con nosotras también – dijo Ash refiriéndose a ella, a Charlotte y a Kim -. ¿Lo de siempre? – preguntó mientras una sonrisa de lado se formaba en su rostro.

-Lo de siempre – respondimos al unísono.

Fuimos directo a la barra e hicimos el mismo pedido que hacíamos cada vez que decidíamos tomar algo todas juntas. Luego de unos minutos de espera, tuvimos enfrente nuestro cuatro vasos de vodka esperándonos para ser degustados.

Sabíamos exactamente lo que teníamos que hacer. La primera empezaba la fila y en cuanto el vidrio hacía contacto con la madera, la siguiente debía beberse su trago.

-¡¡Esperen!! – gritó Charlie deteniéndonos –. Quiero brindar por nosotras y por nuestro próximo sueño a realizar cuanto antes…

Elevamos los vasos y los hicimos chocar entre sí unas cuántas veces, deseando por dentro que nuestra fantasía de viajar juntas, alguna vez se volviera realidad.

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